· El copago
sanitario, cómo nos afecta y el por qué de su puesta en marcha.
· Las recetas
pasarán a costar entre un 10% y un 60% más, según renta o situación laboral.
· El objetivo es la
modificación de la financiación de la sanidad pública y no de carácter
"recaudatorio", porque tiene un "escaso impacto económico",
expresó Ignacio González.
· “si el Gobierno se preocupase más en recortar
en duplicidades administrativas y en perseguir el fraude fiscal, no haría falta
esta medida” – José, policía municipal Comunidad de Madrid.
Mientras me organizaba para plantear y dar forma al siguiente
reportaje, me llegó al recuerdo la novela Mujercitas
de Louise May Alcott. En ella, con el marco de la Guerra Civil Norteamericana
en pleno apogeo, cuatro jóvenes y su madre tienen que hacer frente a las
vicisitudes de una familia “tipo” del momento, pero sin contar con padre y
marido correspondientemente ya que está en el frente, y unos ingresos muy
escasos. Estas dos situaciones llevan a lo largo de la novela a Josephin, la hermana mayor, a elegir
como su acompañante y futuro
marido Theodore Laurence, un joven apuesto y de clase media alta, al que
no ama pero que está dispuesto a colaborar con la familia económicamente. Y los
más importante, pagar los medicamentos
Elizabeth, la tercera hermana en discordia, que contrae escarlatina.
Con dicha imagen en nuestro recuerdo como símil al tema que vamos a
analizar, y que más adelante volveremos a citar, nos centraremos primero en
cómo nos afecta a todos la imposición del copago sanitario en un país donde
está reconocida constitucionalmente la universalidad de la sanidad pública y
gratuita para los ciudadanos que la componente.
En primer lugar, esta propuesta obtuvo la forma necesaria para su
puesto en funcionamiento cuando el Presidente de la Comunidad de Madrid,
Ignacio González, sacó el hacha de los recortes y anunció la creación de una
nueva tasa de un euro por cada receta expedida el pasado mes de octubre, el
conocido copago farmacéutico (aunque sería más correcto hablar de “repago
farmacéutico”, como afirmó el propio presidente durante la citada sesión el
parlamento de la comunidad). Así, La Comunidad de Madrid es, después de
Catalunya, la segunda comunidad que cobrará un euro por receta médica, con el
fin de reducir el gasto farmacéutico.